Unos 2.000 detenidos en Atenas en una operación contra la inmigración ilegal
Atenas, 30 mar (EFE).- Unas 2.000 personas han sido detenidas en los últimos tres días en una macrooperación en el centro de Atenas contra los inmigrantes indocumentados y la venta callejera sin licencia.
«Entre ayer y anteayer detuvimos a 1.500 personas. De hoy no hay datos definitivos, pues las operaciones aún continúan, pero aproximadamente, en total, son ya unas 2.000 personas», explicó a Efe un portavoz de la policía.
El ministro griego de Protección Ciudadana (Orden Público), Mijalis Jrisojoidis, dio la orden el miércoles de comenzar una operación para «acabar con la ilegalidad» en el centro de Atenas.
Según pudo comprobar hoy Efe, la presencia policial ha aumentado en los barrio de Omonia, Kipseli y Agios Pantelimonas, donde reside un gran número de inmigrantes, especialmente de origen asiático y africano.
Patrullas de la policía, en moto o en automóvil, recorrían las calles y pedían la documentación a los viandantes, deteniendo a todo aquel que no la llevase.
En numerosas calles había autobuses blindados de la policía y los agentes introducían en ellos a los inmigrantes, presuntamente sin documentos, por decenas.
El miércoles, tras una reunión con la cúpula policial, Jrisojoidis anunció que 200 agentes especiales que acaban de completar su instrucción serán utilizados en estas operaciones y la intención es que otros 1.100 efectivos se unan a las llamadas «escuadras motorizadas de reacción rápida» en las próximas semanas.
El ministro también ha prometido la creación en un mes de 30 nuevos centros de detención para albergar hasta 30.000 inmigrantes indocumentados, aunque los analistas consideran muy difícil que un país tan endeudado sea capaz de construir tanto y tan rápido.
Numerosas ONG han criticado las deplorables condiciones en las que se interna a los inmigrantes en los actuales centros, apenas media docena en un país que se ha convertido en la puerta de entrada del 90 % de los inmigrantes y refugiados que pretenden llegar a la Unión Europea.
Según un informe del centro de estudios heleno ELIAMEP, en 2011 habitaban en Grecia 1,1 millones de inmigrantes, cerca de un 10 % de la población, de los que unos 400.000 carecían de permiso.
«Nuestras ciudades han sido tomadas por los inmigrantes ilegales, debemos retomarlas», afirmó el jueves el líder conservador, Antonis Samaras, uno de los socios del Gobierno del exbanquero Lukás Papadimos.
Parecidas declaraciones ha hecho el socialista Jrisojoidis, quien frecuentemente achaca la delincuencia en Grecia a «los extranjeros».
«Los griegos son un pueblo pacífico. El principal problema viene por la presencia de miles de personas que viven en Grecia de forma ilegal», dijo este mes el ministro.
«Debemos ser francos y admitir que entre la población griega, especialmente la de Atenas, hay preocupación por la seguridad pública. Y, por supuesto, esto hace que el Ministerio de Protección Ciudadana deba tomar medidas», reconoció a Efe el presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos de Grecia, Kostis Papaioanu, en una entrevista reciente.
Pero avisó de que «no se debe ligar criminalidad e inmigración» porque ello daría «coartada para el crecimiento de la xenofobia y los ataques racistas», que se han incrementado significativamente en los últimos años.
Además, explicó que en el centro de Atenas viven numerosos grupos en riesgo de marginación, como inmigrantes sin papeles, drogadictos, personas sin hogar o prostitutas, junto a griegos y extranjeros con permiso de residencia.
«Me temo que ahora, para ganar apoyo de cara a las elecciones, toda esta gente será expulsada sin importar si ha hecho algo o no contra la ley», denunció.
Las elecciones anticipadas, aún no convocadas oficialmente, están previstas para el próximo 6 de mayo.