Los escritores Leonardo Padura y Petros Márkaris dan su versión de la crisis
Atenas, 24 jun ((EFE).- Con un «duelo de titanes» entre el cubano Leonardo Padura y el griego Petros Márkaris ha concluido el V Festival LEA -Literatura en Atenas- que durante once días reunió en la capital griega a figuras de la cultura iberoamericana.
Padura y Márkaris pusieron ayer la guinda con un coloquio sobre su visión de la crisis en este maratón cultural por el que también pasaron Luis Alberto de Cuenca, Daniel Mordzinski, Elicura Chihuailaf, Juan Vicente Piqueras, Jorge Arbeleche o Alexis Díaz-Pimienta, entere otros.
Cultivadores del género negro y unidos por la popularidad de sus novelas, editadas en español por Tusquets, y por su común admiración a héroes de ficción, como el detective Pepe Carvalho de Manuel Vázquez Montalbán o el comisario Montalbano creado por Andrea Camilleri, tanto Padura como Márkaris reclamaron la proximidad cultural y sentimental entre los lectores griegos e hispanos.
Traducidos ambos a numerosos idiomas y asiduos de los circuitos literarios internacionales, Padura (La Habana, Cuba, 1955) y Márkaris (Estambul, Turquía, 1937) coincidieron en desvincular la crisis de la esencia de su trabajo como narradores.
«Hace quince años, cuando nadie la llamaba así, mi comisario Jaritos ya se encontraba con cadáveres originados por la crisis», afirmó Márkaris para dar la razón a Padura, quien sostuvo que «la crisis es otro nombre de un mismo fenómeno económico; cuando en Cuba -señaló- vivimos bajo el Periodo Especial nos acostumbramos a cosas que ahora nos parecen impensables».
El público refrendó con aplausos continuos la charla que, moderada por Víctor Andresco, director del Cervantes griego, abarcó las distintas visiones de los tópicos culturales, las modas literarias y los géneros .
«Lo siguen llamando novela negra porque la etiqueta de novela social les parece pasada de moda», afirmó Márkaris, recién galardonado con la Medalla Goethe del Gobierno alemán y las perspectivas del mundo globalizado.
Unánimes en su admiración por Hemingway, los dos escritores coincidieron en su afición por las novelas policiacas del mediterráneo y América del Sur.
«La invasión de novela negra escandinava y de los países del Norte refleja patrones de conducta de sus protagonistas que no conectan igual con nuestro temperamento», afirmó Padura y Márkaris le asistió añadiendo que estos «producen lástima por la tristeza de sus vidas y disuaden de su lectura por la sobreabundancia de páginas».
Galardonado con el Premio de la Academia de Atenas por su última novela, «El hombre que amaba los perros», en la que cuenta la vida de Trotski y del español que lo mató, Ramón Mercader, Padura es el creador del detective Mario Conde, protagonista de ocho novelas, la penúltima de las cuales «La cola de la serpiente» relata la historia de la inmigración china a Cuba.
Su próxima novela «Herejes», una mezcla de historia y ficción que se desarrolla en tres tiempos diferentes, aparecerá en septiembre, igual que «Pan, educación, libertad», la última de la trilogía de Petros Márkaris.
El escritor griego ha consagrado también ocho novelas a las andanzas de su comisario ateniense Kostas Jaritos, un gris funcionario de policía que arrastra la rémora de haber sido miembro de un estado represor y que sin embargo hace gala de una conmovedora humanidad. EFE