Inmigrantes en huelga de hambre contra la detención indefinida en Grecia
Atenas, (EFE).- Los inmigrantes del centro de internamiento de extranjeros de Corinto, en Grecia, se han declarado en huelga de hambre para protestar contra la nueva normativa del Gobierno griego que permite alargar el tiempo de detención de manera indefinida, según informaron hoy medios locales.
Los inmigrantes denuncian que la medida, aprobada en febrero por el Ministerio de Orden Público, elimina los límites al periodo de detención -que la Unión Europea fija en un máximo de 18 meses- y permite a las autoridades retenerlos de forma indefinida mientras no firmen un documento en el que se comprometen a salir de Grecia voluntariamente.
«Esta gente lucha para expresar su oposición (a la nueva normativa). Todos ellos están siguiendo la huelga», declaró a Efe el sacerdote Maurice Joyeux, que visita regularmente el centro de detención para proveer de ropa, zapatos, libros y otros objetos a los internos. Sin embargo, denunció Joyeux, cuando visitó el recinto hace pocos días la Policía no le permitió la entrada.
Los afectados, originarios de países como Pakistán, Marruecos o Argelia, protestan también contra las condiciones en que viven en el centro de detención de Corinto, el más grande de Grecia, donde denuncian que reciben malos tratos por parte de los guardias y que a menudo no tienen comida ni agua potable.
«Se quejan de que reciben comida en mal estado y, muchas veces, insuficiente», explicó el sacerdote, quien también aseguró que desde el inicio de la huelga, el pasado lunes, unas 20 personas han sido trasladadas a Atenas para ser atendidas por problemas de salud.
La decisión de modificar la ley obtuvo el respaldo del Consejo Jurídico del Estado, pero fue rechazada recientemente por un tribunal de Atenas, que resolvió que contravenía la legislación nacional y europea y falló a favor de su derogación.
En un comunicado hecho público el día en que iniciaron la huelga, los implicados alertan sobre los graves problemas de salud físicos y psicológicos que padecen algunos de ellos, especialmente los que están retenidos desde hace más de un año y medio.
Además, tachan la decisión de «injusta» y «racista» y afirman que con ella el Gobierno heleno les está «masacrando».
«Están desperdiciando nuestras vidas y matando nuestros sueños y esperanzas dentro de las prisiones. Todo ello a pesar de que ninguno de nosotros ha cometido ningún delito», aseguran en la nota.
Según Joyeux, al menos 40 de los detenidos, procedentes de diferentes países, llevan internados más de 18 meses.
El próximo domingo se ha programado en Corinto una protesta en solidaridad con los inmigrantes