Doña Sofía asiste en Atenas a las bodas de oro de Constantino y Ana María
Atenas, (EFE).- La reina Doña Sofía asistió este jueves, acompañada por la infanta Elena, a la celebración de las bodas de oro de su hermano, Constantino de Grecia, y Ana María de Dinamarca, que citaron en Atenas a un selecto grupo de invitados para celebrar el 50 aniversario de su unión.
Doña Sofía llegó al Club Náutico de El Pireo, donde se celebró una cena de gala en honor al matrimonio, acompañada de su hermana, la princesa Irene.
Ambas llegaron sonrientes y no dudaron en posar unos segundos ante la prensa concentrada a las puertas del recinto, que cuenta con unas espectaculares vistas al mar y a la bahía del municipio de El Pireo.
Minutos después fue el turno de la infanta Elena, que se presentó junto a su prima Victoria de Borbón-Dos Sicilias y el marido de ésta, el armador griego Marcos Nomikos.
Aunque su presencia había sido confirmada por la casa real griega, faltaron a la cita la infanta Cristina y su marido, Iñaki Urdangarín.
Tampoco viajaron a Atenas don Juan Carlos ni los reyes, don Felipe, que tenia audiencias durante toda la mañana de hoy, y doña Letizia.
Los anfitriones, Constantino de Grecia y Ana María de Dinamarca, llegaron junto con sus hijos Pablo (y su mujer, Marie Chantal Miller), Alexia (junto a Carlos Morales), Teodora y Filipo.
A la entrada del Club Náutico se pudo ver también al hijo del matrimonio, Nicolás, y a su esposa Tatiana Blatnikk.
A la cena acudieron amigos como el antiguo rey Simeón de Bulgaria y su esposa, Margarita Gómez-Acebo, que guardan muy buena relación con doña Sofía y su hermano y nunca faltan a las celebraciones familiares por reducidas que sean.
Asimismo, entre los invitados había miembros de otras casas reales, como la reina Margarita de Dinamarca, hermana de Ana María, o el depuesto rey de Serbia.
También participaron miembros del Comité Olímpico Internacional, del que Constantino es miembro de honor (obtuvo una medalla de oro en las Olimpiadas de Roma), y representantes de la vida política, empresarial y cultural griega, entre ellos varios armadores conocidos, como el matrimonio Vardinoyannis.
La casa real helena adelantó que el menú del convite estuvo presidido por productos y vinos locales, amenizados con una actuación también al estilo griego.
Con todo, la intención, según esta fuente, fue celebrar una ceremonia íntima, de carácter estrictamente privado y familiar, con algo más de cien asistentes, que ya ayer por la noche fueron agasajados con una cena de bienvenida en el exclusivo restaurante del Museo de la Acrópolis.
Por parte de la familia real española a la cena asistió solo doña Sofía, porque, aunque estaba previsto que la infanta Elena y los duques de Palma la acompañasen, finalmente no acudieron.
Esta es la segunda visita a Grecia de doña Sofía en lo que va de año, pues viajó a Atenas a principios de marzo para asistir a la proyección de un documental y a un responso en homenaje a su padre, el rey Pablo I, en el 50 aniversario de su muerte.
En dicha ocasión, con doña Sofía estuvieron, además de sus hijas Elena y Cristina, los reyes don Felipe y doña Letizia, que aunque no estuvieron en la presentación de la cinta sí acudieron al cementerio del Palacio de Tatoi, donde están enterrados los miembros de la familia real griega desde 1913.