Segunda votación de candidato presidencial griego en clima de suma crispación
Atenas, 22 dic (EFE).- El Parlamento griego vota mañana en segunda vuelta al aspirante a la presidencia de Grecia, Stavros Dimas, en un ambiente de suma crispación por las denuncias de compra de votos y la oferta del primer ministro, Andonis Samarás, a la oposición de participar en su Gobierno si respalda a su candidato.
En la primera ronda, el pasado miércoles, Dimas, de 73 años, obtuvo 160 votos, lejos de los 200 (dos tercios de la Cámara) que se requieren en las primeras dos vueltas.
Tras el anuncio este domingo de Samarás ofreciendo ampliar su Gobierno a miembros de la oposición si aceptaban votar a Dimas, se espera que en la votación de mañana el candidato obtenga un mejor resultado que en la primera, pero todavía lejos de los 200 necesarios.
De no salir elegido en esta vuelta celebrará una última el próximo 29 de diciembre, en la que el candidato necesitará ya tan solo 180 votos (tres quintos), 25 más de los que tiene la coalición gubernamental de conservadores y socialdemócratas.
Tomando como base de cálculo a los diputados que se han mostrado abiertos a votar a favor de Dimas en alguna de las siguientes rondas, bien sea porque han decidido respaldar la iniciativa de Samarás o porque ya lo habían anunciado de antemano, los medios griegos llegaban hoy a la conclusión de que en la segunda vuelta el candidato podría reunir hasta 170 votos y en la tercera, 175.
Un papel relevante lo desempeñarán los 24 diputados independientes, muchos de los cuales proceden originariamente de las filas de conservadores y socialdemócratas y a quienes iba dirigida sobre todo la oferta de Samarás, junto a posibles tránsfugas de última hora de Dimar, la izquierda moderada que formó hasta el año pasado parte del Gobierno tripartito.
El la primera ronda, sin embargo, tan solo 5 de los diputados independientes optaron por respaldar al ex comisario europeo y varias veces ministro griego Dimas, mientras que no obtuvo apoyo alguno del resto de la oposición, es decir, del izquierdista Syriza, los comunistas del KKE, los nacionalistas Griegos Independientes, Dimar y los neonazis de Amanecer Dorado.
Si ya la primera votación se celebró en un ambiente de máxima polarización, pues el fracaso del Gobierno de imponer a su candidato automáticamente llevará a la convocatoria de elecciones anticipadas, esta segunda se celebra en un clima aún mas enrarecido, tras denunciar un diputado de los Griegos Independientes un intento de soborno a cambio de votar a favor de Dimas.
A ello se añadió el domingo el intento «in extremis» de Samarás de recabar mas apoyos al ofrecer a la oposición «proeuropea» participar en su Gobierno a cambio del apoyo a Dimas.
El jefe del Ejecutivo aseguró que con la elección del presidente Grecia recuperaría la estabilidad y «podrá negociar la salida del Memorándum (rescate) y un nuevo paraguas de ayuda».
Samarás asumió así una iniciativa lanzada días atrás por un grupo de ocho diputados de la oposición, básicamente parlamentarios independientes y de Dimar.
A cambio de su respaldo al candidato presidencial, estos diputados exigían la creación de un Gobierno de transición para finalizar las negociaciones con la troika de acreedores, una reforma constitucional y la convocatoria de elecciones a lo largo de 2015, requisitos que el primer ministro aceptó todos.
La propuesta, no obstante, se ha encontrado con el rechazo de toda la oposición y en algunos casos incluso se ha interpretado como un intento de comprar el apoyo de los diputados con cargos ministeriales.
Durante los últimos días, el cruce de reproches, filtraciones de grabaciones que pretenden demostrar el intento de un empresario de «comprar» el voto del diputado en cuestión, e indirectas por parte de otros parlamentarios que también apuntarían a irregularidades, han convertido todo el proceso de votación en un sainete de mal gusto.
El Gobierno, por su parte, jugaba a la carta del miedo, insinuando que la convocatoria de elecciones y la posible victoria de Syriza desembocará irremediablemente en la quiebra del país.
En caso de que Dimas no logre en la tercera ronda reunir los votos necesarios, se deberá convocar elecciones, que se celebrarían el 25 de enero o el 1 de febrero, es decir, en pleno proceso de evaluación del programa de rescate por parte de los acreedores. EFE