Rajoy advierte de partidos que prometen «imposibles» y «generan frustración»
Atenas, 14 ene (EFE).- El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, ha apoyado hoy en Atenas al primer ministro de Grecia, Andonis Samarás, que busca la reelección en las inminentes elecciones en su país, y ha advertido de los partidos en la UE que prometen «imposibles» porque eso genera frustración.
Un aviso que ha lanzado al ser preguntado en la comparecencia junto a Samarás ante los periodistas por los riesgos que considera que conllevaría la victoria electoral de partidos como Syriza, en Grecia, o Podemos, en España.
Pese a ello, ha subrayado que no había viajado a Atenas para hablar de ninguna fuerza política en concreto, sino para defender las reformas «duras y complicadas, pero indispensables» que han tenido que poner en marcha Grecia y España en los últimos años para dejar atrás la crisis y lograr el crecimiento económico y la creación de empleo.
«Los demás pueden decir lo que quieran, pero prometer cosas que son imposibles no tiene ningún sentido y genera, además, una enorme frustración», ha insistido en alusión a algunas de las propuestas que lanzan partidos como Syriza o Podemos.
En esa línea, ha recalcado que los países necesitan certidumbre, confianza y estabilidad, y no inestabilidad ni «bandazos», máxime en un momento como el actual, cuando se está saliendo de la crisis.
Asimismo ha reiterado que el futuro común está en Europa, no fuera de la UE, y que «el euro no es un proyecto a la carta, sino que requiere compromisos constructivos y no unilateralismo y confrontación».
«Una Europa fuerte y estable -ha explicado- necesita estados miembros fuertes y estables, con gobiernos elegidos democráticamente que respeten los compromisos adquiridos y contribuyan a la unidad y recuperación de nuestro continente».
Al ser preguntados por la propuesta del líder de Syriza, Alexis Tsipras, de renegociar la deuda griega si logra ser el próximo primer ministro de su país, Samarás ha advertido de que no se pueden cambiar las reglas de juego con cada nuevo gobierno «porque así no podría haber ni Unión Europea ni euro».
Un argumento que ha respaldado el jefe del Ejecutivo español, ya que ha considerado que si se modifican esas reglas cada vez que hay un cambio de gobierno en un país de la UE, «no se podría gobernar con un mínimo de sensatez, sentido común y eficacia».
«Las reglas son las que hay y todo el mundo las respeta», ha señalado antes de insistir en su idea de que no conviene decir que se va a hacer lo que no es posible porque esa actitud provoca muchos problemas.
Frente a esas promesas imposibles ha elogiado la labor de Samarás, de quien ha dicho que ha sido testigo de su lucha con éxito para restaurar la credibilidad y para sacar a Grecia de una crisis sin precedentes.
«Tengo un gran respeto por su valentía, por sus logros. Es un verdadero amigo, es un socio de fiar y un verdadero líder», ha añadido.
Tanto en Grecia como en España ha reiterado que se ha respondido a la crisis «con reformas, no con rupturas, con solidaridad y no con aislamiento».
Unas reformas que ha reiterado que dan sus frutos porque España y Grecia están ya en cabeza del crecimiento en la zona euro y están creando empleo neto.
«Si no bajamos la guardia, si continuamos las políticas que se han puesto en marcha, estaremos en condiciones de situar nuestras economías en la senda de un crecimiento sostenido y estable y garantizaremos un futuro de bienestar», ha señalado.
Samarás, que ha explicado que las reformas se han hecho porque es «lo que imponía la situación», ha agradecido a España su participación en el mecanismo de rescate griego con una aportación de 26.000 millones de euros.
«Nunca vamos a olvidar quién nos ayudó en una situación difícil, y el pueblo griego va a devolver el dinero», ha asegurado.
Al plantearle si la canciller alemana, Angela Merkel (a quien algunas fuerzas políticas griegas culpan de la situación económica que atraviesa su país), podría realizar una visita a Atenas como la que ha hecho hoy Rajoy, Samarás ha señalado que es el primer ministro de una Grecia hospitalaria y, por supuesto, daría la bienvenida a cualquier socio.
En su reunión, Rajoy y Samarás han hablado también de la lucha contra el terrorismo yihadista y la inmigración ilegal, así como de las posibilidades del plan Juncker para impulsar el crecimiento en la UE.
El presidente del Gobierno español ha cerrado su visita a Atenas con un almuerzo con el primer ministro griego en el Museo de la Acrópolis, donde ha visitado varias de sus salas. EFE