El Gobierno portugués se opone a una conferencia para reestructurar la deuda
Lisboa, 30 ene (EFE).- El Gobierno portugués expresó hoy su oposición a la propuesta del nuevo Ejecutivo griego de celebrar una conferencia internacional para debatir sobre la reestructuración de la deuda.
El primer ministro portugués, el conservador Pedro Passos Coelho, fue rotundo a la hora de posicionarse acerca de la discusión abierta por el nuevo jefe del Gobierno griego, el izquierdista Alexis Tsipras, que defiende la renegociación con los organismos internacionales de la deuda de su país para que regrese a niveles sostenibles.
«No estaré al lado de ninguna conferencia que sea propuesta para reestructurar o perdonar deuda», subrayó Passos Coelho durante su intervención en el debate quincenal del Parlamento.
Insistió en que está en desacuerdo con cualquier tipo de renegociación y justificó su postura en los sacrificios realizados en Portugal durante los últimos años, en un contexto de crisis similar al que se vivía en Grecia.
«No creo que esta sea una perspectiva interesante para todos los países que hicieron un esfuerzo con éxito para resolver sus problemas de desequilibrio externo, que tuvieron que garantizar su financiación en condiciones difíciles (…) y que saben lo que les costó negociar sus programas de ajuste», argumentó.
El primer ministro portugués -en el cargo desde 2011 y que afrontará elecciones este año, inicialmente programadas para octubre- resaltó que Grecia debe «respetar sus compromisos y todas las reglas, como el resto».
Opinó que cualquier tipo de reestructuración de deuda en Grecia «tampoco sería una ventaja para Portugal» y manifestó su esperanza en que Atenas «consiga encontrar su camino».
«Sabemos que el respeto que le debemos al Gobierno griego éste nos lo debe también al resto. No hay gobiernos de primera, de segunda o de tercera», recalcó Passos Coelho, quien instó a Tsipras a «esclarecer» cuáles serán sus decisiones en el plazo más breve posible.
El primer ministro fue duramente criticado por la oposición de izquierdas, que consideró la llegada de Syriza al poder como un presagio del cambio que puede producirse en varios países de Europa que celebran comicios este año.
Comunistas y marxistas se han mostrado públicamente a favor de la renegociación y recuerdan que la deuda de Portugal equivale ya al 131 % del PIB, mientras que desde el Partido Socialista se mantienen de momento a la expectativa. EFE