Unas 300.000 hectáreas dañadas por las inundaciones en el río Evros
Atenas, 9 feb (EFE).- Agricultores y ganaderos empezaron hoy a evaluar los daños producidos por las inundaciones en el río Evros, situado en la frontera con Turquía, que han afectado a 300.000 hectáreas en el noreste de Grecia.
Los afectados avisaron de que un evaluación real tardará su tiempo, ya que no podrá darse por terminada hasta que el agua se haya retirado por completo de la zona, inundada durante la semana pasada.
El responsable de Desarrollo Rural explicó que se trata de 220.000 tierras de cultivo y llegó a expresar el temor de que los agricultores pierdan toda una temporada de cosecha este año.
«Hay 100.000 hectáreas cultivadas con cereales de invierno y alfalfa, algodón, ajo, espárragos y maíz», detalló el jefe de la rama de la organización griega de Seguros Agrarios.
Tras visitar el lugar, las autoridades griegas competentes consideraron necesario crear una comisión interdepartamental inmediata para afrontar los principales problemas para la economía rural vinculada al río Evros.
El presidente de la Unión de las Cooperativas Agrarias del Evros, Lazaros Kitsidis, dijo en declaraciones al portal digital «in.gr» que el daño producido es «demasiado grande» y destacó que el desastre golpeó a casi toda la provincia.
«No son solo inundaciones. Si tenemos en cuenta que las heladas son frecuentes y que 35.000 animales han muerto por viruela, es casi como decir que la economía rural ha muerto», sentenció.
Kitsidis afirmó que espera ver acciones proporcionales a la catástrofe por parte del Gobierno, pero admitió que «no es fácil encontrar tanto dinero para indemnizaciones».
Reprochó además la falta de infraestructuras para anticiparse a este tipo de acontecimientos y advirtió de que, si el Gobierno griego «no se sienta en la mesa con turcos y búlgaros, se seguirán afrontando los mismos problemas».
Las fuertes lluvias que cayeron en Bulgaria durante los últimos días obligaron a las autoridades de la región a ordenar la apertura de las presas por riesgo a que fueran derribadas, lo que causó la subida del cauce del Evros y provocó graves inundaciones en el noreste de Grecia. EFE