Tsipras y Avramópulos piden cambios en la política de inmigración de UE
Atenas, 7 abr (EFE).- El primer ministro griego, Alexis Tsipras, y el comisario europeo de Inmigración, Dimitris Avramópulos, se mostraron hoy partidarios de reformar la política de inmigración europea y en concreto el reglamento Dublín III.
«El Gobierno griego es muy escéptico respecto al reglamento Dublín III y también la Comisión Europea lo es. Eso es algo que debe cambiar, pero que depende en primer lugar del Consejo Europeo», destacó Avramópulos tras una reunión con Tsipras.
Con ello aludió al reglamento que establece que los inmigrantes irregulares puedan ser devueltos al país por el que entraron en la Unión Europea.
El comisario europeo aseguró que «Europa está dispuesta a demostrar su solidaridad a los socios de la periferia que hacen frente a una creciente presión por la llegada masiva de inmigrantes».
Avramópulos felicitó al Ejecutivo griego por la hoja de ruta para la gestión de inmigración presentada en el reciente consejo de ministros de Interior e Inmigración, pero le advirtió que «el tema de la política de inmigración no debe ser mezclado con las negociaciones entre Grecia y las instituciones europeas».
Varios ministros griegos han advertido de que Grecia podría abrir sus fronteras para que los inmigrantes vayan a otros países de la UE si no llega a un acuerdo en las negociaciones con sus acreedores.
Tsipras, por su parte, recalcó que la gestión eficaz de la inmigración «requiere una doble solidaridad, hacia los seres humanos que llegan a Europa para escapar del hambre y de las guerras y hacia los Estados miembros de la periferia».
Para que esta doble solidaridad sea efectiva, subrayó, «es necesaria la reforma del reglamento Dublín III», y la «redistribución (de los inmigrantes) entre los países de la Unión Europea».
El primer ministro griego prometió además que elaborará una política de inmigración a largo plazo, que respete el marco legal europeo y criticó «la retórica populista» que, recalcó, «fortalece a los neonazis en Grecia y en Europa».
Tsipras admitió que en los últimos años Grecia se transformó en un «ejemplo negativo de cuarto trastero de almas» y que esto «facilita la tarea de los que quieren criticarla, pero no resuelve el problema».
Grecia ha sido repetidamente denunciada por el Consejo de Europa y por Amnistía Internacional por las condiciones de acogida de los inmigrantes y los refugiados.
Una de las primeras acciones del nuevo Gobierno ha sido dejar salir de los centros de detención a todos los inmigrantes que habían cumplido el plazo máximo de reclusión de 18 meses. EFE