El vicecanciller alemán apoya la idea de un referéndum «claro» en Grecia
Berlín, 27 jun (EFE).- El vicecanciller alemán y líder del Partido Socialdemócrata (SPD), Sigmar Gabriel, mostró hoy su apoyo a la idea de convocar un referéndum en Grecia siempre que se presente «con claridad» a los ciudadanos la oferta europea de ayuda y el plan de reformas necesario.
«Haríamos bien en no rechazar simplemente la propuesta del señor Tsipras o argumentar que se trata de un truco; si las preguntas son claras, es decir, si está claro que lo que se votará es un programa negociado, entonces puede tener sentido», señaló Gabriel en declaraciones a la radio pública alemana Deustchlandfunk.
El vicecanciller, socio de Angela Merkel en la gran coalición de gobierno alemana, recordó que en 2011 en entonces primer ministro griego, Yorgos Papandreu, ya propuso un referéndum sobre el segundo programa de rescate a su país, que no se celebró porque el resto de líderes europeos «lo bloqueó».
Gabriel consideró que aquella actitud fue un error e insistió en que la condición para una consulta debe ser la transparencia.
Según explicó, Europa no puede facilitar a Atenas sin condiciones los 20.000 ó 30.000 millones de euros que quiere el primer ministro griego, Alexis Tsipras, pero éste puede preguntar a sus ciudadanos si quieren esa ayuda y, al mismo tiempo, adoptar las medidas necesarias para poder recibirla.
Europa está ofreciendo «mucho» a Grecia y muchas de las duras reformas que se barajaban al inicio de las negociaciones ya no están sobre la mesa, subrayó.
Gabriel hizo hincapié además en la oferta del presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, para movilizar inversiones hacia Grecia que impulsen el crecimiento.
No obstante, dejó claro que ese plan sólo tendrá sentido si Atenas inicia una estrategia que evite contraer nuevas deudas cada día y, en ese contexto, consideró «razonable» que tanto Juncker, como Merkel o el presidente francés, François Hollande, exijan reformas para sanear los presupuestos públicos.
En opinión del vicecanciller alemán, si Tsipras no quiere ese plan y decide rechazar «la manos tendida», estará optando por una política «muy ideológica». EFE