AI denuncia las «condiciones terribles» que sufren los refugiados en Lesbos
Bruselas, 24 ago (EFE).- Amnistía Internacional (AI) denunció hoy las «condiciones terribles» que viven los refugiados e inmigrantes en la isla griega de Lesbos, ante la «grave escasez» de medios y la falta de coordinación que existe en la misma, pese a ser la que mayor número de llegadas está experimentando en Grecia.
«Una coordinación débil y una grave escasez de instalaciones y de personal están creando condiciones terribles para los cientos de refugiados y migrantes que llegan todos los días en la isla griega de Lesbos», aseguró AI en un comunicado, en el que manifiesta las conclusiones de un «equipo de investigación» que acaba de regresar de la isla.
AI apunta que las autoridades están «sobrecargadas» y disponen de «escasos recursos», lo que les impide hacer frente al «dramático aumento» del número de personas que llegan a sus costas, hasta 33.000 desde el 1 de agosto, según la ONG.
Por ello, los refugiados y migrantes «deben depender de voluntarios locales, de los activistas de las ONG, la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) y de los turistas» para cubrir esta carencia, según AI, que recalcó que en su mayoría, hasta un 90 % en 2015, llegan a Europa «huyendo de los conflictos en Afganistán, Irak y Siria».
Precisamente, hoy fueron encontrados dos refugiados muertos en la zona marítima de Lesbos, situada en el mar Egeo, mientras que otros cinco están desaparecidos después de que un bote hinchable se hundiera al intentar llegar a la costa.
La directora adjunta de AI para Europa y Asia Central, Gauri van Gulik, recordó que «la ardua odisea a la que se enfrentan las personas que huyen de los conflictos no termina en las costas de Grecia».
«Forzados a caminar largas distancias en un calor abrasador y a estar en campos miserables o al raso, los refugiados y los demandantes de asilo no tienen mucha más alternativa que continuar su viaje, contribuyendo al desastre que hemos visto en la frontera de Macedonia en días recientes», añadió Van Gulik.
Macedonia decretó el jueves pasado el estado de emergencia ante la masiva entrada de indocumentados, y la situación derivó en altercados con la policía, que empleó gases lacrimógenos, granadas aturdidoras y balas de goma contra los que intentaban atravesar el paso fronterizo con Grecia.
«Esto no es sólo una tragedia griega, sino una crisis de toda Europa. Se está desplegando ante los ojos miopes de los líderes europeos que priorizan la seguridad de las fronteras sobre la ayuda a los sobrevivientes del conflicto», lamentó Van Gulik.
Van Gulik pidió «puntos de entrada seguros» para los refugiados e instalaciones «para recibirlos con dignidad» en la que calificó de la «peor crisis de refugiados en el mundo desde la Segunda Guerra Mundial». EFE