Tsipras apela a sentido común europeo y pide solidaridad en vez de fortalezas
Atenas, 6 mar (EFE).- El primer ministro griego, Alexis Tsipras, apeló hoy a Europa a recobrar el «sentido común» y el compromiso con los valores de la solidaridad y el humanismo, y rechazar las ideas extremistas que buscan convertir Europa en una «fortaleza».
Europa está en un momento en que se decide si vence el «miedo y el racismo» o «la solidaridad y el humanismo», dijo Tsipras en un discurso ante el comité central de su partido, Syriza, en la víspera de la cumbre europea extraordinaria sobre refugiados.
El primer ministro resumió la estrategia con la que acudirá a este Consejo europeo en tres ejes fundamentales: solidaridad con los refugiados, reducir las corrientes migratorias (repatriación a Turquía de inmigrantes ilegales y lucha contra el tráfico) y el reparto equitativo de las obligaciones entre la Unión Europea con consecuencias para aquellos que no respeten las decisiones.
En los últimos días Tsipras ha subrayado repetidamente que pedirá en esta cumbre un compromiso formal sobre la reubicación de refugiados desde Grecia e Italia -hasta ahora solo han sido trasladados algo más de 600 personas de las 160.000 acordadas en septiembre pasado- y que reclamará que se sancione a los que violen los principios de un reparto solidario de las cargas anclado en los Tratados de Lisboa.
Además, instará a que se formalice el reasentamiento de los refugiados desde Turquía a países de la UE.
El líder izquierdista recalcó que Grecia seguirá siendo solidaria con los refugiados, no porque lo exigen las convenciones internacionales y europeas, sino porque «nos lo exige nuestra cultura».
El primer ministro destacó que si Europa continúa por el camino de la austeridad y el cierre de fronteras, terminará en un callejón sin salida.
Durante su intervención aludió asimismo a los retrasos que está habiendo en la negociación con los acreedores sobre la primera evaluación del programa de rescate -de cuyo éxito dependerán los próximos desembolsos- y culpó de ello al Fondo Monetario Internacional (FMI).
Coincidiendo con la cumbre de mañana, los ministros de Economía y Finanzas del Eurogrupo estudiarán los progresos de Grecia en el cumplimiento del programa y, según los medios locales, se espera que determinen la fecha en que regresarán a Atenas los representantes de la denominada cuadriga de acreedores (Comisión Europea, Banco Central Europeo, Mecanismo Europeo de Estabilidad y Fondo Monetario Internacional).
Mientras tanto, la situación en Grecia sigue agravándose y este fin de semana el gobernador de la región de Macedonia Central, Apóstolos Tsitsikostas, pidió al Gobierno que declare el estado de emergencia en su zona a la vista de que ha estallado una «crisis humanitaria».
En el campamento fronterizo de Idomeni están atrapadas unas 13.000 a 14.000 personas, situación que previsiblemente empeorará si, como esperan los analistas en este país, la cumbre de Bruselas confirma el cierre definitivo de la denominada ruta de los Balcanes.
Dramática es también la situación en el puerto del Pireo, adonde siguen llegando a diario en torno a un millar de personas desde las islas, muchas de las cuales no pueden ser trasladadas a centros de acogida por falta de espacio.
En las islas del mar Egeo esperan hoy más de 5.000 personas su traslado a Atenas y Salónica.
Al mismo tiempo, miles de personas llevaron hoy alimentos y medicamentos a la emblemática plaza de Syntagma, en el corazón de Atenas, en respuesta a un llamamiento realizado por una plataforma ciudadana.
En pocas horas la plaza se llenó de miles de bolsas repletas de productos que, metidos en cajas, se transportarán al puerto del Pireo y al centro de acogida de Ellinikón. EFE