La UE inicia la deportación de inmigrantes y refugiados de Grecia a Turquía
Ilya U. Topper. Estambul, 4 abr (EFE).- El plan de deportación de refugiados desde la Unión Europea (UE) a Turquía ha comenzado hoy con la llegada a la costa turca de 202 personas, principalmente pakistaníes, bengalíes y afganos, que serán luego expulsados a sus países de origen.
Los primeros tres barcos con deportados desde las islas griegas han atracado en la ciudad portuaria de Dikili, en la costa egea del país, donde funcionarios turcos han recibido a los retornados.
Un total de 136 de ellos proceden de la isla de Lesbos, a apenas 25 kilómetros de distancia, y 66 de la isla de Quíos, medio centenar de kilómetros más al sur.
Todos pasaron por las carpas instaladas en el muelle de Dikili, donde se les tomaron las huellas dactilares y se les hizo un chequeo médico.
Varios ambulancias y autobuses se hallaban en una franja del muelle rodeada por vallas y vigilada por la policía.
El ministro turco de Asuntos Europeos, Volkan Bozkir aseguró que desde allí iban a ser trasladados de inmediato a centros de deportación situados en la provincia de Kirklareli, fronteriza con Bulgaria.
La Policía europea de fronteras Frontex ha confirmado en su página web el número de 202 deportados de las dos islas helenas, acompañados por 180 policías de esa agencia europea, además de agentes policías griegos.
«Esta operación de readmisión se coordina entre las autoridades griegas y turcas como parte del acuerdo entre Unión Europea y Turquía», señala el comunicado.
Bozkir aseguró hoy en la emisora Habertürk que en esta primera remesa de deportados no se hallaban aún ciudadanos sirios, aunque estimó que éstos representarán el 70 % de quienes serán deportados.
Según la prensa turca, en los tres barcos, el «Lesvos», el «Nazli Jale» y el «Ertürk», llegaron sobre todo pakistaníes, bengalíes y afganos.
A todos los retornados no sirios se les abrirá un expediente de repatriación, conforme al procedimiento legal e incluyendo una solicitud a su país de origen, especificó el ministro, vaticinando que este proceso será «lento».
«Mientras tanto, estos inmigrantes con motivos económicos serán huéspedes de Turquía», agregó.
El domingo, su colega de Interior, Efkan Ala, incluyo a iraquíes y afganos entre los candidatos a la repatriación, si bien la agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) considera a ambos colectivos refugiados y no inmigrantes económicos, al provenir de países en guerra.
El gobernador de Esmirna, Mustafa Toprak, recordó hoy en una rueda de prensa que el acuerdo de deportación con la UE incluye a todos los refugiados e inmigrantes que llegaron a las islas griegas después del 20 de marzo pasado.
Señaló que, por ahora, se maneja una lista de 5.000 personas de las que aproximadamente la mitad serían sirios, aclarando que sólo el resto de nacionales llegarán en ferry a Turquía.
«Los que no son sirios serán enviados a los centros de repatriación desde Dikili, o mañana desde Çesme, u otro día desde Kusadasi, Güllük o Bodrum», dijo Toprak, enumerando cinco puertos de la costa egea turca.
Los sirios, en cambio, no tocarán esta zona en absoluto, ya que «se enviarán directamente desde las islas griegas en avión al aeropuerto de Adana», según el gobernador.
Desde esta ciudad, situada 800 kilómetros al este de las islas griegas, los refugiados se distribuirán en diversos campamentos y centros de acogida temporales en el sureste, especificó Toprak.
Bozkir había mencionado especialmente el campamento de Osmaniye, ubicado a menos de cien kilómetros de Adana, como destino previsto para los sirios retornados.
Aclaró también que Ankara enviará a la UE exactamente a tantos refugiados sirios como deportados recibe y negó que hubiera un tope previsto de 72.000 personas, cifra que describió como un cálculo para el reparto interno europeo pero sin interés para Turquía.
El ministro subrayó que, aparte de este acuerdo, que sólo abarca cinco islas, Ankara mantiene un pacto distinto con Grecia, en vigor para todo el territorio pero con «una cuota de mil personas».
«El año pasado, Grecia nos remitió una lista de 5.000 personas. Nosotros dijimos que podíamos aceptar a 5.000 pero al final llegaron unos 500-600, porque una importante parte de los inmigrantes habían llegado ya a otros países», dijo el ministro. EFE