Relaciones grecoturcas a prueba por demanda asilo de otros dos militares
Atenas, 24 feb (EFE).- La petición de asilo de otros dos militares turcos en Grecia, supuestamente implicados en el golpe fallido de julio de 2016, supone una nueva prueba de fuego para las tensas relaciones con Turquía poco después de la decisión de la Justicia helena de no extraditar a ocho oficiales de aquel país.
El ministro de Defensa, Panos Kammenos confirmó hoy indirectamente estas informaciones al asegurar que el destino de estos hombres es asunto exclusivo de la Justicia.
En declaraciones a la televisión privada ANT1, Kammenos destacó que «la Justicia decidirá, de acuerdo con la legislación y a los tratados internacionales si estos dos hombres serán extraditados o no a Turquía».
«Turquía debe darse cuenta que en un país democrático estos temas los decide el poder judicial y no el Ejecutivo», añadió el ministro de Defensa, que acusó al país vecino de «haber perdido su sangre fría».
Según los medios locales los dos militares admitieron haber formado parte del pelotón de 47 hombres de las fuerzas especiales que intentaron asesinar el presidente turco, Recep Tayip Erdogan, la noche del golpe fallido.
Los dos militares llegaron a Grecia atravesando el río Evros, que sirve como frontera entre los dos países, el 15 de febrero, se entregaron a la policía local acompañados de un abogado y el 20 de febrero presentaron una demanda de asilo.
La tensión entre Grecia y Turquía está en máximos desde que la Justicia griega decidiera, el pasado enero, no extraditar a ocho militares turcos que llegaron en helicóptero a Alexandrúpolis (norte de Grecia) el 16 de julio y pidieron protección internacional.
En los últimos días Turquía ha asegurado varias veces que sus barcos de guerra se han acercado de los islotes Imia (Kardak en turco), cuya soberanía reivindica desde 1996, versión rechazada por las fuerzas armadas griegas.
El 17 de febrero, según denunció Grecia, un barco de guerra turco entró en aguas griegas, cerca del islote del archipiélago de Dodecaneso Farmakonisi, y de ahí disparó hacia Turquía.
El ministro de Exteriores griego Nikos Kotziás advirtió entonces, en declaraciones a la televisión privada SKAI, que «se equivoca Turquía si cree que, a causa de la crisis económica que nos afecta, no estamos en condiciones de encargarnos de nuestra seguridad». EFE