La gran boda griega…. en Spetses

Ayer miércoles tuvo lugar la boda del Príncipe Nicolás de Grecia, segundo hijo del Rey Constantino y de su esposa la Reina Ana María en la isla de Spetses, a pocas horas del Pireo con Tatiana Blatnik. Nicolás, de 40 años, llevaba mas de seis años enamorado de Tatiana, una rubia espectacular. Nacida en 1980 en Venezuela, de padre esloveno y madre alemana, se crió entre Suiza y Estados Unidos y trabaja desde el 2004 en Londres para Diana de Fustember, la diseñadora de moda.

Desde hacia dos días un gran numero de familiares, muchos de ellos miembros de familias reales europeas, se encontraban en la bonita isla. La mayoría se alojaron en casas de amigos en la isla o en Porto Heli y los restantes en el lujoso hotel Poseidón, frente al paseo marítimo.

La noche antes hubo una recepción ofrecida por los padres del novio, los Reyes de Grecia en dicho hotel, a la que asistieron la mayoría de los invitados. Entre ellos, la Reina Sofía y los Principes de Asturias, la Infanta Elena y la Infanta Cristina con su marido Iñaki Urdangarín. Juntos y en harmonía, lo ví con mis propios ojos. Cuando terminó el cocktail, los mas jóvenes de la Familia Real española se fueron a cenar con otros primos reales y amigos, entre ellos Rosario Nadal, al restaurante Orlof en el Puerto Viejo .

Y ayer, en el Monasterio de San Nicolás, se reunieron familia y amigos próximos para la boda. Una ceremonia que comenzó exactamente a las 7.30 anunciadas, con los hombres de la familia griega llegando por mar desde Porto Heli y reuniéndose con la Reina Ana Maria, las hijas y nietas para llegar minutos antes. Llegó la novia en una bonita calesa típica de Spetses con su padrastro (su padre falleció cuando ella tenía 8 años) y entraron en el Monasterio. Dentro, en la pequeña iglesia, la familia mas cercana y los testigos. Fuera, en el claustro, muchos invitados.

Nadie de los medios de comunicación pudo entrar. Pero al salir, los ya casados Nicolás y Tatiana se besaron contentos y vitoreados por todos, y volvieron a la calesa de la novia para irse hacia la recepción. Sonaban todas las sirenas de los barcos del puerto y las campanas de San Nicolás y la verdad parecía una escena de cuento. Lo más gracioso, cuando aparecieron las damas de la novia, todas vestidas igual a la americana: los muchos fotógrafos enloquecieron, lo mismo que cuando llegó la Familia Real española (muchos aplausos de los griegos también ) y los sobrinos del novio, 5 del Príncipe Pablo con Marie Chantal y 4 de la Princesa Alexia con el canario Carlos Morales. La que obtuvo mas aplausos, la novia y la Reina Sofía. Las mas fotografiadas además de la novia: Doña Letizia y las Infantas, las damas de honor de la novia y los niños de la Princesa Alexia y Carlos Morales.

El traje de Tatiana, creación de Sänchez, un diseñador venezolano que trabaja en Nueva York, nos pareció a todos los presentes precioso. La novia tiene un cuerpo de modelo, pero el traje palabra de honor favorecía y aun mas el bolero de encaje, la cola y el velo. Una tiara de diamantes y perlas (de su suegra la Reina Ana María, proveniente de la Casa Real danesa y anteriormente de la sueca) y unos pendientes largos también con diamantes y perla.

Y luego hubo una recepción privada, en la finca de los señores Kútsis, con dos enormes entoldados, uno para cenar y otro para bailar. La cena, servida por el Ecali Club de Atenas, un rissotto con champán, ternera al limón con verduritas y tarta nupcial pavlova (es decir con nata y merengues). Me han contado que hubo muchos brindis y que los novios se fueron hacia las siete de la mañana.

Ahora bien , he visto una vez mas que los medios griegos son muy creativos con las noticias. Porque ni ví a la Reina de Inglaterra, ni al Principe Carlos y a Camila (los únicos representantes de la familia real inglesa fueron el Príncipe Michael de Kent con su mujer Marie Christine y su hija Lady Gabriella .Tampoco ví a Clooney, ni a Elton John, Abramovitch y Carolina de Monaco. Sí ví a muchos armadores griegos, a gente conocida de Atenas y a muchos Principes Herederos de Suecia, Dinamarca y Noruega, familia del novio en su mayoría.

«Na mas zísun», que es la felicitación griega que viene a ser que vivan muchos años. Esta boda llena de belleza y glamour ha distraído a los griegos de sus muchos problemas… y ha mostrado una imagen preciosa al extranjero, la mejor campaña turística gratuita para el país. Se han visto imágenes de sol y mar, sí, pero en el marco de una isla cuidada, de una ceremonia con tradición y buen gusto, de monasterios encalados, barcos y bonitas casas … de película, vamos.

Autora: Begoña Castiella
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